Creencia confiada
y voluntad que obra en consecuencia. Ambas juntas.
No
es solo creencia pues como dice Santiago
2. 19 Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen,
y tiemblan.
El
episodio de la mujer que tocó el manto de Jesús es un buen ejemplo de qué es fe
Mt 9. 20 Y
he aquí una mujer enferma de flujo de sangre desde hacía doce años, se le
acercó por detrás y tocó el borde de su manto; 21 porque decía
dentro de sí: Si tocare solamente su manto, seré salva. 22 Pero
Jesús, volviéndose y mirándola, dijo: Ten ánimo, hija; tu fe te ha salvado. Y
la mujer fue salva desde aquella hora
La
mujer creía en Jesús y confiaba en su poder sanador lo cual movió su voluntad
para acercarse a Él y tocarlo aun transgrediendo la ley mosaica en cuanto,
según esta, ella era inmunda y debía estar apartada de las personas para no hacerlas
a su vez, inmundas.
Del
mismo modo se ve en Lc 7 Jesús sana al hijo de un centurión en donde el mismo
Jesús proclama que éste ha mostrado la mayor fe entre todo Israel.
Asimismo
en la narración de episodios y milagros leemos la declaración de Jesús: tu fe te ha salvado.
La
fe como confianza la remarca Jesús en Mt 6. 30
Y si la hierba del campo que hoy es, y mañana se echa en el horno, Dios la
viste así, ¿no hará mucho más a vosotros, hombres de poca fe?
Mr 11. 22 Respondiendo Jesús, les dijo: Tened fe en
Dios. 23 Porque de
cierto os digo que cualquiera que dijere a este monte: Quítate y échate en el
mar, y no dudare en su corazón, sino creyere que será hecho lo que dice, lo que
diga le será hecho. 24 Por tanto, os digo que todo lo que
pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá.
En esta cita de nuevo se muestra la creencia confiada que mueve la voluntad para una acción.
En esta cita de nuevo se muestra la creencia confiada que mueve la voluntad para una acción.
Citas de Reina Valera 1960
Elspeth
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